La Iglesia, en virtud de la Misión que le fue confiada por el Hijo de Dios, es consciente de que todo
proceso de evangelización integral, “implica la promoción humana y la auténtica liberación” (DA 399), y
teniendo muy presente las enseñanzas de su Maestro que se identifica con los pobres (Mt 25, 40) y
especialmente sus numerosos ejemplos de preocupación por los más necesitados (Mt 8,3.16; 9, 6.29-30.36). Es en razón de esto, entre otros motivos, que la Iglesia cuenta con una Pastoral Social.
La Pastoral Social es la acción orgánica de la Iglesia que se ocupa de las realidades de la vida temporal
del ser humano en orden a orientar y promover su desarrollo integral a través de procesos, de acuerdo a los principios evangélicos.
La naturaleza de la Pastoral Social determina que, además de tener a la Sagrada Escritura como su
fuente principal de inspiración, tenga también una referencia vital a la Doctrina Social de la Iglesia, a sus
Principios, de manera especial al de la Dignidad de la Persona Humana, a sus Valores, y aprenda de ella a
desarrollar Criterios de Juicio y Líneas de Acción.
Elementos propios de la Pastoral Social son la reflexión y la contemplación, que la llevan a la vivencia
concreta de la Caridad cristiana, de esta forma, la Iglesia Pueblo de Dios, se hace presente en la sociedad, en sus personas y en sus estructuras.
Reafirmamos que la Pastoral Social no es una tarea pastoral optativa o, incluso, provisional; no es
tampoco un apéndice de la evangelización, ni mucho menos la tarea última. La Pastoral Social se inserta en el contexto de la única misión de la Iglesia que es “Evangelizar” (cf. DPPSM 311) y responde al proyecto
mesiánico de buscar la salvación integral del ser humano en cuerpo y alma (Mt 9,6).
La pastoral social es la expresión concreta de la dimensión social de la fe de los cristianos, en razón de
ello, debe basarse en una profunda experiencia de encuentro personal con Jesucristo, y su acción Eclesial no puede ser en nombre propio, siempre en nombre de la comunidad parroquial y de sus pastores.
El trabajo pastoral de esta comisión es encabezado por el binomio “Pastoral Social-Cáritas”, el cual
tiene el compromiso de estructurar, formar, motivar y acompañar a cada una de sus dimensiones que son:
Pastoral de la Salud, Pastoral del Trabajo, Pastoral Penitenciaria, Fe y Compromiso Social, Movilidad Humana (migrantes), Pastoral del Cuidado Integral de la Creación (Ecología) y la dimensión de Pueblos Originarios y Afromexicanos.
Funciones de la Pastoral Social-Cáritas
Entre las tareas fundamentales de la Pastoral Social-Cáritas se encuentran:
1.- El difundir y promover los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, especialmente la Dignidad de la
Persona Humana, la Solidaridad, la Subsidiaridad y el Bien Común.
2.- Enseñar y motivar a vivir también los valores de la Justicia social y la Caridad cristiana en todos sus niveles (asistencial, promocional, liberadora y reconciliadora)
3.- La promoción y la vivencia de la “Opción preferencial por los pobres”, rasgo fundamental que marca la
fisionomía de la Iglesia latinoamericana (cf. DA 391).
4.- Una atenta contemplación e interpretación de los signos de los tiempos en orden a atender la problemática
actual de las comunidades.
5.- El empleo de metodologías orientadas a la reconstrucción del tejido social.
6.- Promover mediante la enseñanza y acciones concretas, el cuidado de la casa común (Ecología).
7.- La enseñanza también, y la defensa de los Derechos Humanos desde una perspectiva evangélica.
8.- Responder a las crisis humanitarias (emergentes) como las migraciones forzadas y a las catástrofes naturales causadas entre otros motivos por el cambio climático.
9.- Establecer lazos de comunicación y cooperación con instituciones y organismos de la sociedad civil con el fin de impulsar iniciativas de transformación social.